Mentalidad Hosteleramente .5

Métodos hay más de un millón, pero principios hay pocos.
Quien tiene principios puede seleccionar sus propios métodos.
Quien prueba métodos, ignorando sus principios, tendrá problemas.

El aprendizaje y la práctica de los principios de Hosteleramente nos han proporcionado soluciones precisas y resultados extraordinarios:

Nuestros 4 principios

1. El propósito por encima del problema y de la solución

Tomamos decisiones basadas en el propósito, lo que significa alinear nuestras acciones
con el motivo que nos mueve.

Al enfocarnos en lo que queremos conseguir, comprendemos como debemos resolver los retos que nos aparecen por el camino.

2. El enfoque duradero por encima del cortoplacismo

El enfoque a corto plazo nos hace responsables de las decisiones hoy, pero no de sus consecuencias en el largo plazo.

Medimos, incentivamos y verificamos iniciativas que garanticen el camino hacia un resultado positivo, tanto inmediato como duradero.

3. La información y los datos por encima de la intuición

No existe una receta para el éxito en los restaurantes. Por eso sólo nos basamos en evidencia y en ciencia.

Debemos apartar creencias, instintos, y dejar de movernos por impulsos o dejarnos llevar por las emociones a la hora de tomar decisiones.

4. Las acciones por encima de las intenciones

Se trata de tomar la decisión de ejecutar acciones concretas que promuevan e incentiven a que otros pasen a la acción.

Somos un motor de cambio para los demás y activamos el cambio desde el ejemplo.
Vamos más allá de una declaración de intenciones.

Nuestros 6 valores

Hospitalidad

La gente olvidará lo que haces; olvidarán lo que dices, pero nunca olvidarán cómo les hiciste sentir.


La hospitalidad es la pasión inigualable por hacer feliz a la gente.

La hospitalidad es nuestra razón de ser, y por eso, está presente en cada paso.

Curiosidad

Apasionados por los nuevos retos, siempre estamos dispuestos a ser los primeros en probar una nueva idea o tecnología.


La mejor manera de evaluar nuevas ideas es realizar experimentos que nos ofrezcan conocimiento real y demostrable.

Innovación

Somos optimizadores a los que les encanta mejorar todo lo que existe para llevar su rendimiento al siguiente nivel.


No compartimos la idea de: “si funciona, no lo cambies”. Todo puede mejorar, aunque esté funcionando bien, puede funcionar aún mejor.

Colaboración

La colaboración fomenta la detección de oportunidades para que el restaurante sea productivo y funcione como un engranaje.


Crear un entorno de aprendizaje para que los colaboradores mejoren sus habilidades, liberará el potencial de las personas e impulsará el crecimiento.

Comprensión

Lo que no se define no se puede medir. Lo que no se mide no se puede mejorar. Lo que no se mejora acabará desapareciendo.

Muchos restaurantes carecen de un modelo de gestión de abajo hacia arriba, donde el personal base transmite la información vital para la toma decisiones.

Inconformismo

La eterna persecución de la excelencia significa que cuando hacemos algo, lo imaginamos desde todos los prismas posibles.

La excelencia no es una meta o un fin, es hacer las cosas más ordinarias de manera extraordinaria.

Mantener la conciencia de estos principios y valores nos permite aplicarlos en cada decisión

La mentalidad es la clave de todo, y de ahí nació nuestro nombre.

Con la mentalidad adecuada, se toman las decisiones correctas, aquellas que necesite nuestra organización en cada momento, porque más importante que las herramientas, es la mentalidad con que las utilicemos.

Desarrollar el restaurante, la organización, los procesos y la experiencia, no tiene que ver con la tecnología, ni siquiera con la aplicación de una metodología, sino que tiene que ver con la mentalidad con la que operamos.

Establecer nuestra mentalidad es lo que permite a las organizaciones adaptarse al cambio continuo del entorno, del mercado y de las tendencias.

Para evolucionar tu restaurante, debe cambiar la mentalidad de las personas involucradas; y esta es la transformación más poderosa que podamos emprender, ya que, la organización podrán seguir desarrollando nuevas iniciativas por sí misma que acabarán teniendo éxito.

Sin embargo, cambiar la mentalidad de las personas no es una tarea fácil. La única manera de hacerlo es a través de la experiencia adquirida: aprender aplicando los principios y valores en todo momento.

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